La artista
“Es una obra de aluminio, en la que realicé un rostro de perfil, cuya forma estuvo varios años sin alterar. Posterior a 2004, hubo un re-despertar hacia lo ancestral, mis raíces, mi impronta. A partir de la reflexión y el retorno, le imprimí al rostro toda una suerte de petroglifos estilizados de mi pueblo, enmarcados en ángulos y relieves que muestran violencia, marcas, cicatrices y caminos. Tal vez para exponer al mundo cuan codpeña soy.”